Por: Juan Pablo Pérez, Comunicador Social y Periodista
En el mundo actual, la información es poder. Las organizaciones que pueden recopilar, analizar y utilizar datos de manera efectiva tienen una ventaja competitiva significativa. Esto es especialmente cierto en el campo de las relaciones públicas, donde los datos pueden ayudar a una agencia y su equipo a comprender mejor a sus públicos, identificar tendencias y oportunidades, y medir el impacto de sus campañas; sin dejar a un lado las herramientas clásicas.
Hasta hace poco, aproximadamente cinco años atrás, el análisis de datos en las relaciones públicas estaba limitado por su disponibilidad y la capacidad de los profesionales para analizarlos. Sin embargo, el desarrollo de nuevas tecnologías (Data Mining, Big Data, Full Data, Inteligencia Artificial) y la creciente disponibilidad de datos han hecho que el análisis de estos sea más accesible y asequible.
De acuerdo con el licenciado y mágister en Comunicación Periodística, Institucional y Empresarial, Darío Leonel Minore, para llevar la comunicación a otro nivel y convertirla en un activo estratégico de la organización es necesario contar con una estrategia integral, clara y definida que genere diálogos enriquecedores con nuestros públicos. Lo cual es imposible si no contamos con información que dé sustento a nuestro plan.
Los datos pueden ayudar a los profesionales de las relaciones públicas de muchas maneras. Por ejemplo, pueden utilizarse para:
Comprender mejor a los públicos: El análisis de datos puede ayudar a los profesionales a identificar las necesidades, intereses y motivaciones de sus públicos. Esto puede ayudar a los profesionales a crear mensajes y campañas más efectivas.
Identificar tendencias y oportunidades: Puede ayudar a los profesionales a identificar tendencias y oportunidades en el entorno. Contribuye a posicionar mejor sus organizaciones en el mercado.
Medir el impacto de las campañas: Ayuda a medir el impacto de sus campañas. Así como evaluar el éxito de los esfuerzos del equipo de trabajo y hacer los ajustes necesarios para optimizar los resultados.
El estadístico William Edwards Deming dijo que "sin datos, eres otra persona más con una opinión". Esto significa que los datos nos permiten fundamentar nuestras creencias y tomar decisiones más informadas.
Por supuesto, el análisis de datos no es una solución mágica. Los datos por sí solos no pueden garantizar el éxito del manejo de las comunicaciones y relaciones públicas. Sin embargo, estos pueden ser una herramienta poderosa para ayudar a tomar decisiones más informadas y eficace.
No obstante, es importante resaltar que los seres humanos no somos robots y la intuición y creatividad también juegan un rol fundamental en las ciencias sociales. Es así como “la data” no pueden reemplazar la experiencia, la creatividad, la intuición; cuotas necesarias para lograr resultados positivos.
En conclusión, las organizaciones que no implementan el análisis de datos en sus estrategias de relaciones públicas podrían estar en cierta desventaja competitiva. Sin embargo, estas cifras deben ir de la mano de la creatividad e intuición para que las organizaciones tracen y alcancen objetivos retadores.
