Por: Juan Pablo Pérez, Comunicador Social y Periodista
Los políticos han modificado considerablemente la manera de difundir sus mensajes de campaña, por lo menos para los próximos sufragios en nuestro país. Así lo demuestra el elevado número de inscritos ante la Registraduría Nacional, por la opción de firmas. De hecho, nuestra constitución mediante el Artículo 28 de la Ley 1475 de 2011 permite a todas las personas que quieran ser candidatos a una curul de elección popular, lo logren mediante rúbricas y no únicamente a través de los partidos políticos ya existentes.
Lo curioso del caso y que llama poderosamente la atención, por lo menos para las próximas elecciones a la presidencia de La República, es la cantidad de líderes políticos que se están postulando mediante este mecanismo. Personajes como Sergio Fajardo, Marta Lucía Ramírez, Alejandro Ordóñez e, increíblemente, el delfín político, Germán Vargas Lleras se encuentran en esta lista.
El mensaje de estos candidatos es claro, quieren participar por la contienda electoral sin estar encasillados en ningún partido político tradicional, haciendo proselitismo antes de la fecha establecida – mientras logran las firmas - para que de este modo se refresque su imagen y obtengan la mayor cantidad de votos posibles. Sin embargo, es peculiar que, Germán Vargas lleras, el fundador y “exmilitante” del partido Cambio Radical, se haya decantado por esta opción. No obstante, la política no es improvisada y el nieto del expresidente Carlos lleras Restrepo aprovechará esta oportunidad para atrapar votos de indecisos y aumentar su gigantezca maquinaria política, para ubicar a sus “aliados” en su nuevo partido político y posteriormente situarlos en su administración, una vez gane la presidencia.
En ese orden de ideas, la “firmatón” parece ser la solución ya que en las recientes encuestas, los más opcionados a quedarse con la contienda electoral tienden a ser quienes han optado por este mecanismo. Ver aquí. Aunque el camino a la presidencia hasta ahora comienza, muy pocos candidatos quieren llevar a sus espaldas la reputación de los partidos políticos a los que inicialmente pertenecieron, quizá porque los partidos en Colombia se burocratizaron, perdieron el rumbo y la verdadera ideología histórica que los representaba, dejando atrás las fervientes convicciones derivando en pérdida de confianza e imagen entre la opinión.
Si bien esta opción se diseñó para brindar oportunidades a la ciudadanía, no todo es positivo para la democracia, de hecho Carlos Arias, catedrático y asesor político, afirmó a Caracol Radio lo siguiente: “Esta moda de las firmas demuestra el desprestigio de los partidos, pero le hace mucho daño a la democracia, porque fortalece el caudillismo y el personalismo en la política… Existe una estrategia comunicativa de fondo, porque a medida que avance la campaña vamos a ver cómo esos supuestos candidatos independientes terminan rodeados de los partidos y haciendo cualquier tipo de alianzas para ganar la Presidencia; porque lo que sí es un hecho es que en Colombia ningún candidato está listo para ganar solo y mucho menos sin el respaldo de los políticos tradicionales”.
Por lo tanto, tómese la tarea de elegir adecuadamente a su candidato, entérese quién lo rodea y si realmente este comunica confianza y honestidad, más no manipulación.
A pesar de que Colombia acaba de llegar a 28,7 millones de conexiones a Internet y las encuestas, tanto tradicionales como online, estipulan que Vargas Lleras no será presidente, o por lo menos en primera vuelta, es evidente que la red no vota y las alianzas políticas apenas arrancan. ¡Qué vivan las firmas y el nuevo lavado de conciencias!


