Por: Carolina Mejía, Comunicadora Social y Periodista
Por estos días, el mundo entero se viste de calabazas, fantasmas, arañas, telarañas, brujas y todo tipo de decoración alusiva al Halloween, que se celebra el 31 de octubre pero se siente desde los primeros días del mes.
Las redes sociales se convierten en toda una vitrina de fotografías y videos de niños, a quienes sus padres les cumplen el sueño de ser princesas, superhéroes y todo tipo de personajes de moda, así como de adultos que disfrutan de esta celebración, con disfraces de todo tipo para fiestas o simplemente para acompañar a sus hijos en la aventura. Hasta los perros lucen su propio Outfit y son expuestos en las diferentes redes sociales.
Es un mes en el que los medios de comunicación enfocan gran parte de su información en esta celebración y son los encargados de difundir la celebración desde los años 60, convirtiéndose en una fecha comercial y social que integra a familias, vecinos, amigos y compañeros de trabajo alrededor de la unión, los dulces y la creatividad.
Pero ¿Conocemos el verdadero significado de la palabra Halloween? o ¿Simplemente celebramos por tradición o moda, sin saber su verdadero origen?
Los colombianos mencionamos esta palabra porque es la representación internacional de la fecha, aunque culturalmente no es nuestra. Esta fiesta, que nació con los celtas, antiguos pobladores de Europa Oriental, Occidental y parte de Asia Menor, es conocida también como el Día de Brujas, el Día de los Difuntos o el Día de los Niños y según el portal Colombia Aprende, Halloween significa en inglés medieval ''All hallow`s eve'' que en español quiere decir ''Víspera de todos los santos'', ya que esta celebración se realiza la noche del 31 de octubre y la fiesta de Todos los Santos es el 1 de noviembre, teniendo una connotación religiosa.
La historia cuenta que durante esa noche “los espíritus de los difuntos caminaban entre los vivos, por lo que se realizaban fiestas y ritos sagrados que incluían la comunicación con los muertos. Los sacerdotes Druidas iban de casa en casa demandando todo tipo de comidas extrañas para su propio consumo y para ofrecerla después en el festival de la muerte. Si la gente se negaba a sus demandas hablaban una maldición demoniaca sobre el hogar, y la historia cuenta que alguien de esa familia moría en transcurso del año”.
Hoy en día, y sin el carácter religioso, Halloween se convirtió en una noche de terror, brujas y fantasmas, luego de que inmigrantes irlandeses introdujeran esta celebración a los Estados Unidos y estos, a su vez, al resto del mundo gracias al cine y series de televisión norteamericanas de terror y muertos vivientes. Colombia, por supuesto, no fue la excepción.
Lo que muchos saben, pero no toman en cuenta, es que esta noche del 31 de octubre es también el momento en el que grupos satánicos, adoradores del diablo, realizan actos en los cuales el sacrificio de niños es de los rituales más apetecidos.
Y no solo son estas sectas los únicos peligros para los menores, quienes felices añoran usar los atuendos de sus personajes favoritos para salir a recoger la mayor cantidad de dulces posibles. También están los grupos delincuenciales que tratan personas, trafican órganos o simplemente raptan menores para explotarlos laboralmente, los cuales a través de un disfraz logran con mayor facilidad realizar sus fechorías.
El papel de los medios es clave para prevenir a los padres y apoyar a las autoridades. Afortunadamente, he podido observar que cumplen con esta misión informativa, ya nosotros como padres tenemos la responsabilidad de que el Halloween no se convierta en lo que originalmente es, sino en un verdadero Día de Los Niños.
Datos curiosos:
Según una encuesta de Fenalco, los colombianos aceptan disfrutar de esta fecha con los siguientes resultados:
• El 75% de los encuestados aceptan que se disfrazan ellos y sus hijos. Además, el 80% acepta comprar dulces para compartir con los niños.
• Los centros comerciales poco a poco van ganando más espacio en la actividad de pedir dulces. Hay un aumento de un 6% en la celebración de este día con los amigos, en cambio, la celebración con los niños disminuyó en un 4%.
• La compra del disfraz se ha convertido en un rito para los colombianos, quienes destinan entre 50 y 100 mil pesos para la compra de este según el estudio.
• El 47% de los colombianos buscan ideas novedosas en internet para la creación de un disfraz.
• El 20% lo hace desde las redes sociales.
• Crecen en un 2% las fiestas Halloween empresariales.
