Por: Javier Mojica, Comunicador Social y Periodista
Hace unas semanas escribí acerca de la relación y compra de Twitter por parte de Elon Musk, para lo que no saben uno de los hombres más adinerados y poderosos del mundo, y me parece interesante ver y analizar los últimos acontecimientos que han ocurrido.
Después de los primeros acercamientos, las dos partes llegaron a un acuerdo, el cual empezó a tener problemas debido a algunas condiciones que se querían dentro de la negociación por las partes. Posteriormente, Elon anunció que se quería retirar del acuerdo de 44 mil millones de dólares y Twitter le recordó que tenían una cláusula que obligaba a las partes a pagar mil millones de dólares en caso de que una de ellas se retirara antes de que terminaran las negociaciones.
Seguido de esto, Twitter acusó a Musk de "criticar a la empresa, alterar sus operaciones y destrozar el valor para los accionistas" y añadieron que: "ha descalificado al pacto, creando un riesgo de negocio". Por todos estos sucesos, la empresa ha perdido parte de su valor en bolsa. Cuando empezaron las negociaciones con Elon, Twitter tenía un valor de 54,20, ahora la empresa de tecnología cotiza por debajo de los 35 dólares estadounidenses, de hecho, este lunes su valor bajo un 7% gracias a las aseveraciones para algunos desmedidas de Musk.
Finalmente, el día martes 13 de agosto la junta de accionistas de Twitter votó a favor del acuerdo de adquisición de Elon Musk por 44.000 millones de dólares. “La votación se produjo días después de que Musk enviara su tercera carta a Twitter para rescindir el acuerdo, en este caso por una supuesta indemnización de US$ 7,75 millones que la empresa pagó a su antiguo jefe de seguridad, Peiter Zatko, que posteriormente denunció sus supuestas vulnerabilidades en materia de seguridad y privacidad”, afirma CNN en español en su portal para Latinoamérica.
Por ahora es poco probable que ya no vayamos a escuchar de un nuevo round entre estos dos titanes de la tecnología, pero lo importante es darse cuenta de varios puntos desde el punto de vista de la comunicación empresarial.
Primero, Twitter le está jugando en contra lo que ellos mismos crearon que es su propia plataforma. Podemos ver como las peleas entre Elon Musk y la empresa han hecho bajar el valor de las acciones perjudicando a los accionistas y demás entorno.
Segundo, podemos apreciar como la comunicación de los dos actores ha traspasado en ámbito privado y vemos unas estrategias de comunicación basadas en las noticias que generan cada uno de ellos, involucrando de la misma manera noticias falsas, que es otro de los factores que ha impulsado Twitter desde su aplicación.
Y por último, la falta de responsabilidad con los grupos de interés de las dos compañías ha generado que no solo Twitter sino Tesla sienta el coletazo en bolsa de la situación incómoda en que están metidos. Este es un mal mensaje para el mercado y para los stakeholders que mantienen todo el ecosistema de la tecnología.
