Por: Valeria Esteban, Comunicadora Social – Periodista
Empezó la cuenta regresiva para que nuestro país sepa en pocos días, cuál será el nombre del nuevo Presidente de la República durante los próximos 4 años legislativos, tiempo dado por la constitución, pero que puede ser extendido a la fuerza, si quien llega a este cargo simplemente como ha ocurrido en otros países, se siembra en el poder.
Dado lo anterior, para algunos “expertos en estrategias de comunicación” todo es válido para alcanzar los objetivos de su grupo político, y por esta época nos movemos en un periodo de guerra sucia, en el que agresivamente se crean noticias falsas que dañan la honra del contendor, videos hábilmente editados, calumnias, montajes, imitación de voces para poner en boca de otro frases que hunden su buen nombre y que se multiplican en segundos.
El tema de las bodegas, ha sido bastante comentado en los últimos días, precisamente por ser un engaño mediático, apoyado en cuentas anónimas o falsas, las cuales generan mensajes de dudosa procedencia y que se esparcen en minutos por el fanatismo de sus seguidores, ya que una mentira repetida muchas veces se vuelve verdad ante el público, que lo único que quiere es crear un clima de odio, donde no importa el cómo sino el qué.
Las redes sociales una vez más, son necesarias para estar enterados en una democracia libre, pero se vuelven a poner en la palestra pública por sus contenidos nefastos con los que fácilmente se arrolla y se acaba con un personaje público y para este caso político, como ya se ha comprobado lo han hecho con candidatos a la presidencia.
Es indudable que estamos en un macabro escenario de manipulación de la información donde el equipo de comunicaciones “más inescrupuloso” hace lo que quiere con los incautos que leen sus mensajes y los convencen para orquestar y replicar mensajes sin tener en cuenta las consecuencias que para la buena democracia puede tener.
Aquí, a pesar de las dudas de muchos, de los odios y amores que generan algunos medios de comunicación, solo nos queda confiar en la responsabilidad de la buena prensa, para mantener la información lo más clara y verás posible, para que el público tenga argumentos más claros y pueda generar sus propias opiniones.
Por otra parte, si usted ya tiene clara su decisión sobre el candidato de su preferencia, aléjese por unos días de las redes sociales y no se deje contaminar de los odios, insultos, noticias falsas y todo aquello que logra quitarle la paz. Cumpla con su deber ciudadano el próximo domingo y confíe en que su voto logrará sumar para la decisión que por mayoría el pueblo elija.
