Por: Javier Mojica, Comunicador Social - Periodista
El inicio de año es emocionante para el mundo de las producciones cinematográficas. No solo porque sea un nuevo comienzo para la industria, sino porque se premian a los mejores en diferentes categorías, que cada vez crecen más y más. Desde los premios Globo, el 5 de enero, hasta el 9 de febrero, cuando termina la temporada con la noche más esperada, los Premios Óscar. No obstante, desde el 2014 ha surgido un competidor inédito, que cada vez ha ganado más terreno frente a la cerrada industria de Hollywood: Netflix.
La empresa fue constituida el 29 de agosto de 1997, por Marc Randolph y Reed Hastings. Al principio nadie creyó en ellos, pero en 2003 empezaron a generar ganancias. Los creadores de esta plataforma jamás imaginaron en lo que se convertiría el servicio de películas por streaming y mucho menos que iban a realizar producciones capaces de competir en Los Óscar.
Tras haber conseguido utilidades y tener la oportunidad de invertir, los socios decidieron realizar producciones propias, una jugada bastante arriesgada ya que sus competidores llevaban décadas haciendo cine y distribuyendo las películas. Es así, como en el año 2014 el documental The Square, gana el primer premio Óscar en la categoría “Mejor Documental”, el cual trata la historia de la primavera árabe en Egipto en el año 2011.
De ahí en adelante Netflix no solo iba a brillar en la ceremonia del 9 de febrero, sino también en premios como: Golden Globes, Screen Actors Guild, Berlinale, Directors Guild, Festival de Cannes, Writers Guild, BAFTA y Independent Spirit, que son los más importantes en la industria y que no han perdido su asombro frente al fenómeno mundial de películas vía streaming.
En el caso del Festival de Cannes aceptaron unas producciones, pero después implementaron la condición de que la película debía ser proyectada en cine antes de ser nominada, por lo que Netflix desde el año pasado decidió comprar salas de cine alrededor del mundo para presentar sus trabajos y no tener este tipo de problemas con los jurados de ningún festival o ceremonia de premios.
Es así como la evolución de Netflix ha sido evidente. En lo que respecta a Los Óscar, su evolución en nominaciones es la siguiente: 2014 (1), 2017 (1), 2018 (6), 2019 (15), y en 2020 (22).
Por consiguiente, el número de triunfos que ha conseguido es seis (6), más los que posiblemente van a conseguir este año. Números impresionantes que hasta ahora ningún estudio en tan poco tiempo había logrado.
Otro aspecto relevante son los nuevos competidores de Netflix y los estudios, como, por ejemplo: Amazon, HBOMAX, Rakuten, Vodafone y ahora Disney. Estos recientes adversarios están invirtiendo también en producciones originales, con la idea de buscar un espacio en el mercado y, por supuesto, llegar a ser nominados en alguna de las ceremonias de comienzo de año.
El ejemplo de Netflix debe ser seguido por todas las empresas alrededor del mundo. Sus comunicaciones son impecables y no han tenido escándalos ni denuncias dentro de la organización o países donde están funcionando. Caso contrario a otras aplicaciones que sí han tenido graves inconvenientes. Su rápida expansión también es de admirar y como en cada país han conseguido una relación efectiva con sus stakeholders, han logrado darse un lugar como el competidor más fuerte del mercado global.