Por: Juan Pablo Pérez, Comunicador Social y Periodista
Día a día, la banca móvil se va convirtiendo en un aliado esencial para los citadinos colombianos. Por tal motivo, es común comenzar a encontrar un poco más desocupados los bancos para realizar diligencias de pago en las principales ciudades del país. Sin embargo, al parecer esta es solo la punta del iceberg y nuestra nación comenzará a dejar de utilizar el dinero en efectivo, de manera progresiva.
Si bien es cierto que cada país se desarrolla a un ritmo distinto, indudablemente las aplicaciones para los teléfonos móviles están desempeñando un rol fundamental en la vida transaccional de usuarios de entidades bancarias.
Por ejemplo, un estudio de Visa sobre tecnología Contactless en el mundo (Ver aquí) , publicado recientemente, en alianza con Americas Market Intelligence, arroja los siguientes datos:
90% de los pagos en Australia se realizan con tarjetas sin contacto
50% del PIB en China se procesa a través de códigos QR en móviles
90% de los pagos con móviles en Estados Unidos proviene de Apple Pay
No obstante, Latinoamérica y especialmente en Colombia, el 90% de las transacciones en comercios minorista se hacen en efectivo, lo cual refleja un arraigo cultural a la posesión del dinero físico y desconfianza en las plataformas digitales.
Esto significa un claro reto para las entidades bancarias, las cuales deben “evangelizar” o enseñar mediante una comunicación asertiva a la población, especialmente, ubicada en regiones rurales, sobre cómo funciona y cuáles son los beneficios de la digitalización de la moneda.
De hecho, uno de los periódicos estadounidenses más importantes del mundo, The New York Times, señaló que la moneda en papel permite el crimen, la evasión fiscal, además de dificultar la corrupción. Claro está que en países como el nuestro, aún en vía de desarrollo, los fraudes en digital son cada vez más frecuentes y por ello en estas naciones hay que combatir primero al hampa cibernético, reducir la desconfianza y lograr masificar el formato digital.
Colombia, actualmente, se encuentra en una etapa emergente de pagos sin contacto - herramienta que permite comprar mediante tecnologías -. Algunos ejemplos de este nuevo tipo de herramientas para facilitar las transacciones mediante ecosistemas de pagos donde interactúan personas naturales, comercios y aliados son Nequi, Rapiplay, Daviplata, entre otros.
“Los números evidencian que cada vez más los colombianos prefieren realizar sus pagos y compras por internet. Esta tendencia se refleja en el incremento importante en las transacciones electrónicas. Por los beneficios tangibles en cuanto a agilidad, calidad de vida y seguridad”, señala Gustavo Vega Villamil, presidente ACH Colombia a la Revista Dinero.
Si bien es cierto que el celular es la nueva billetera en muchos países desarrollados, en Colombia, aún falta realizar una ardua tarea junto con actores del estado, empresa privada y entidades bancarias, para que los ciudadanos tengan más opciones de pago sin contacto y mediante campañas innovadoras de comunicación tanto a nivel offline como online, contar las opciones que los usuarios van teniendo a disposición para así contribuir a mejorar la economía de Colombia, la región y mitigar al máximo las práctica de corrupción que tanto nos golpean.